Liberar nuestra mente puede ser parte de nuestra disciplina para una mejor vida, pero ocuparla adecuadamente es también una inversión en nuestro bienestar.

Para eso se ha popularizado el término de “meditación activa”, sin embargo, la palabra “meditación” genera algunas barreras. Ocupar la mente adecuadamente es una forma de lograr liberarnos sin tanta quietud. El nivel de exigencia es un poco menor, ya que estaríamos supliendo un estímulo de concentración por otro, pero en general debemos buscar este tipo de ejercicios no sólo para liberar la mente, sino para ocuparla en actividades que aportan balance a nuestra creatividad.

El arte ya es también reconocido como una de las fuentes terapéuticas por excelencia, y el ejercicio que proponemos hoy, no es otra cosa que el rescate de una de las “artes terapias” más antigüas: Colorear Mandalas.

Los mandalas son imágenes organizadas alrededor de un centro. Están incluidos dentro de la Geometría Sagrada, es decir, su estructura posee códigos que operan como ordenadores e interactúan con nosotros a nivel inconsciente.  Estos códigos universales son creadores de energía vital.

El tipo de vibración que transmite el mandala depende tanto de las formas geométricas como de la numerología oculta en su interior. Pueden ser energías de protección, salud, alegría, fortaleza, comunicación y paz.

Colorear mandalas consiste en ubicar plantillas de mandalas y colorearlos libremente. Al hacerlo estamos realizando un trabajo lúdico-terapéutico que nos permite dejar fluir nuestro niño interior y explorar nuestra creatividad. De esta forma podemos generar armonía, paz y lograr el equilibrio interior. Además nos beneficiamos realizando un trabajo de autocuración y sanación físico-mental.

Otra opción es cerrar los ojos poner una mano en tu corazón y con la otra mano elegir el color que tu corazón dicte.

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Este ejercicio nos ayuda a:

-Entrar en un estado de meditación, de paz y aceptación propia.

-Desarrollar y aumentar la paciencia y liberarnos del estrés.

-Mejorar nuestra concentración antes de estudiar o trabajar.

-Expandir nuestra creatividad.
-Lograr el autoconocimiento, crear un mapa de nuestros sentimientos.

Incluso el psicólogo Carl Jung desarrolló una amplia teoría sobre el trabajo del inconsciente desde la técnica de colorear mandalas.

¡Atrévete a ponerle color y nuevas vibraciones a tu mente! sin duda será tan energizante y liberador como un brainstorming.

B.E.A. Method

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