Les confieso que cuando diseñé el viaje del 2017 no pensé que terminaría con esta botella de #Aurasoma, pero ahora que estamos en EL momento lo veo muy claro. Hemos invertido TANTA #energía en este año de redefinición y reconstrucción personal que claramente necesitamos un “rescate energético”, pero de una nueva energía, de nuestro nuevo YO.
La #B89 una botella nos dice que es momento de “echar el resto” para empezar de nuevo. Para cerrar ciclos requerimos de mucha más energía que para abrirlos ¿por qué? porque solemos asociar con pérdida los cierres, y de alguna forma es cierto. Pero como aprendimos con el #SetTántrico hay que vaciar la copa para poder llenarla de nuestro nuevo yo.
Quiero que trabajemos juntos el cierre de #2017 con esta botella de Aurasoma, el rescate energético. Y no porque seamos víctimas del año, todo lo contrario. Lo que hemos hecho ha sido tan transformador que merecemos un bonus track para concretar lo que trasciende el cambio, la verdadera TRANSFORMACIÓN.
La energía de la transformación es demoledora y constructora a la vez, primero vacía para poder construir de nuevo, pero sólo bajo las bases sólidas. Eso hace la B89, toma nuestras verdades y desde allí rescata la energía que necesitamos para construir de nuevo, por eso también se le asocia con la fortaleza interna, porque son nuestras bases las que nos impulsan y revitalizan.
En los próximos días tendremos una #lunanueva que nos apoyará precisamente en sentir este boost de energía, pero debemos estar abiertos a recibirla y utilizarla para trascender más allá de la queja, el pensamiento limitante, el miedo.
La botella B89 nos brinda la capacidad de reciclar nuestra energía vital y “encendernos” de nuevo, pero esta vez bajo nuestra nueva versión, con nuestros nuevos propósitos, sueños, verdades… incluso heridas. Vamos a aprovecharla para cerrar el set tántrico como merecemos, renovadas. Sin energía desaprovechamos oportunidades ¿alguien quiere perderse en 2018 de algo que merece? ¡Yo no!
Hablando de merecimiento, esta botella también trabaja nuestro orgullo ya no desde el ego sino desde el reconocimiento. Es momento de hacer “memoria y cuenta” como los gobiernos, anotar todos los desafíos superados, todas las habilidades y aptitudes que hemos rescatado, aprendido o potenciado este año. Desde ese lugar también reconocemos la fortaleza personal y el orgullo de ser quienes somos.
Es momento de embellecer nuestro nuevo yo, empecemos por lo orgullosas que estamos de haber pasado este proceso y de hoy, doce meses después, estar en pie y corriendo esa extra milla para materializar la verdadera transformación.
Esta botella nació cuando el calendario Maya terminaba. Nació para decirnos que el tiempo ya no es dinero sino arte, el arte de hacer lo que verdaderamente nos llena el alma con él. Esta botella nació para impulsarnos a cambiar de paradigma. It’s time to shift.
I’m ready! are you?
Con amor,
Bea.-
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